La Senadora Nacional Silvina García Larraburu, presentó un proyecto de comunicación solicitando al Poder Ejecutivo que informe sobre presuntas irregularidades en la reciente licitación para la provisión de pañales al PAMI. Denunció que la empresa adjudicataria habría recibido las condiciones del pliego con quince días de anticipación y que el proceso licitatorio fue deliberadamente acotado, impidiendo las condiciones propias de una competencia leal.
García Larraburu advirtió sobre una preocupante reducción en la calidad de los productos: el peso mínimo de los pañales pasó de 75 a 50 gramos, se eliminaron capas absorbentes y se achicaron las cintas de sujeción. “Estamos frente a una licitación hecha a medida, que perjudica directamente la calidad de vida de nuestros adultos mayores”, afirmó.
Asimismo, cuestionó que la contratación haya recaído en una empresa de logística sin antecedentes en la fabricación de pañales, desplazando a productores nacionales, y pidió aclaraciones sobre los valores establecidos, que serían incluso más altos que los disponibles en el mercado minorista.
Por último, exigió que se transparente el proceso, se garantice la calidad de los insumos y se priorice la industria nacional. “La salud y el bienestar de nuestros jubilados no pueden ser moneda de cambio en negocios que benefician a unos pocos”, finalizó.