El gobernador Rolando Figueroa reiteró hoy su rechazo a la nueva implementación del Impuesto a las Ganancias y consideró que “el debate tiene que ser desde la política”. Se refirió a los planteos que se hicieron en la Justicia Provincial y Federal y expresó que, si bien “somos respetuosos de esos caminos”, desde el gobierno neuquino “seguiremos insistiendo con el debate político”.
“Estamos en contra de la reimplementación del Impuesto a las Ganancias para la renta de la cuarta categoría, porque consideramos que genera un impacto muy desfavorable desde tres planos diferentes hacia las provincias patagónicas y específicamente para Neuquén”, aseguró el mandatario durante una rueda de prensa que ofreció al participar de la Exposición Rural en Buenos Aires.
Criticó la decisión de eliminar el diferencial que se computaba para los trabajadores patagónicos y consideró que debería ser superior al 50%. Dijo que era “una ventaja comparativa en cuanto al incremento de las deducciones personales en un determinado porcentaje por los altos costos de la Patagonia. Para nosotros debería ser por lo menos un 50%”.
Figueroa destacó que con la restitución del impuesto “existe una transferencia entre los distintos trabajadores patagónicos hacia las provincias del norte” y que además se genera una disminución del dinero circulante en las provincias patagónicas. “Que la implementación de esta categoría termine siendo compensada en los recursos que van a ingresar a las provincias por la disminución del Impuesto a los Bienes Personales, para nosotros es un perder desde tres planos diferentes”, aseveró.
“Quienes defienden la progresividad del tributo tendrían que contemplar el impacto económico con la tasa efectiva, donde la propensión marginal al consumo que tiene la Patagonia es alta y la propensión marginal hacia el ahorro es baja”, concluyó.