Tener en Río Negro una estación meteorológica, que funciona hace más de cien años, como la que se encuentra en la localidad de Cipolletti es un orgullo y también una necesidad de seguir contando con sus registros ya que sus datos son de gran ayuda para la región y el país, señaló la Senadora nacional Silvina García Larraburu.

Desde la gestión actual del presidente Javier Milei se avanza con la idea de descontinuarla, con el agravante de querer vender los terrenos de la misma. Perderíamos registros invaluables en referencia a datos históricos y territorio específico donde se realizan mediciones fundamentales que brindan detalles para la toma de decisiones de los productores rionegrinos.

Hace unos días estuve dialogando con el meteorólogo Rodolfo Merlino, quien estuvo a cargo de esta estación durante varias décadas y coincidimos que ante el cambio climático mundial los países suman más estamentos como estos, que permiten medir y registrar datos meteorológicos de gran utilidad para diversas áreas de la sociedad, como la agricultura, la industria, el transporte y la vida cotidiana.

Los datos meteorológicos permiten planificar la siembra, fertilización y cosecha, ya que ayudan a determinar el crecimiento de las plantas, la epidemiología de enfermedades fúngicas y las etapas de desarrollo de los parásitos.

Además desde hace 10 años en su predio funciona una estación de monitoreo de Geomagnetismo.

La estación geomagnética de Cipolletti es uno de los 4 sitios del país donde se monitorea la evolución temporal del campo magnético terrestre. El campo magnético terrestre sirve de escudo protector de todas las eyecciones de partículas eléctricas y radiaciones (tormentas solares) que expulsa el sol. Particularmente en Sudamérica nos encontramos en una región anómala donde los valores de campo magnético van disminuyendo, facilitando el paso de las partículas del sol, pudiendo provocar inconvenientes en las comunicaciones o señales de GPS, por ejemplo. 

En el caso de estos registros de más de cien años, son esenciales para estudios climáticos a largo plazo que permiten identificar tendencias y patrones que afectan la vida en el planeta.

Es por ello que se debe conocer cómo varía el campo magnético en toda la zona y a lo largo de todo el territorio argentino. Además, específicamente en Cipolletti, se suma la importancia de estos datos en la prospección de recursos naturales que se encuentran en esta región precordillerana.

Tras el ajuste que propuso el Gobierno Nacional, la estación de Cipolletti se suma a la larga lista de organismos que podrían dejar de funcionar, una visión totalmente errónea y alejada de las decisiones que toman los países del mundo en esta materia.