En un allanamiento realizado en la tarde de ayer en dos domicilios ubicados en un predio del barrio Labraña de Cipolleti, se rescataron casi una treintena de animales y más de veinte aves. Vecinos del sector habían denunciado olores nauseabundos y la posible contaminación de un brazo del río que atraviesa la zona.
La medida permitió el rescate de 11 caballos, 17 vacunos, 11 gansos y 13 gallinas. Además, en inmediaciones de una de las viviendas se encontraron cabezas de vacas mutiladas y esqueletos de animales y se procedió al secuestro de ganchos, malacates, cuchillos, rastrillos y sierras, entre otros elementos utilizados para la faena clandestina. Además se tomaron muestras de agua del brazo del río que atraviesa el sector.
El allanamiento fue requerido por el Ministerio Público Fiscal y contó con el trabajo de agentes de la Policía y de la Brigada rural, personal de Senasa y de las áreas de ganadería provincial, medio ambiente, zoonosis municipal y del Departamento Provincial de Aguar. Además trabajó el gabinete de criminalistica.
La denuncia había sido realizada el 14 de marzo pasado por vecinos, ante olores nauseabundos de posible origen animal en estado de descomposición. Alertaron también acerca de residuos en el curso del agua que provocaban la contaminación del recurso hídrico. En la misma presentación destacaban que los desechos animales obstruían el causa del brazo del río, lo que provocaba habituales desbordes e inundaciones que perjudicaban a los barrios Labraña y Costa Sur.
Una primera intervención policial pudo determinar que en el lugar había dos viviendas, una deshabitada y otra ocupada por una familia; ambas tenían animales. A partir de allí, la Fiscalía solicitó la allanamiento sustentado en la presunta infracción a la ley nacional 14,346 de protección animal y ante la posible comisión del delito de adulteración de aguas de uso público.
Por ello en tal requisitoria se pide la toma de muestras de suelo, restos de animales, agua y barro en distintas zonas del curso del brazo del río para detectar posibles enfermedades y contaminación. Se requiere no sólo el secuestro de animales sino además de todo tipo de elementos que pudiera ser utilizado para la actividad de la faena clandestina y la requisa de cualquier vehículo encontraban en el lugar.
Con los resultados de la medida realizada ayer, el Ministerio Público Fiscal trabaja en la evaluación y ordenamiento de las evidencias para avanzar en el pedido de audiencias de formulación de cargos.