La Dirección de Sanidad Animal del municipio llevó a cabo un importante operativo de fiscalización y control en el Barrio Unión. La intervención, motivada por denuncias vecinales sobre perros sueltos e incidentes de mordeduras, se realizó en coordinación con la junta vecinal y la escuela del barrio.
Como resultado directo de la acción, el personal de Sanidad Animal labró más de 12 actas de infracción a tutores que incumplían la normativa vigente sobre la permanencia de animales en la vía pública. Además, se procedió a la captura segura de tres canes que deambulaban sin supervisión, constituyendo un riesgo tanto para los transeúntes como para su propia integridad.
Dos de estos perros fueron posteriormente restituidos a sus tutores, quienes ahora deberán asumir su responsabilidad legal. Este proceso incluye el obligatorio patentamiento del animal para asegurar su registro y la castración como medida fundamental para el control poblacional y la prevención de enfermedades, y el pago de la multa correspondiente que será determinada por el Juez del tribunal de faltas número 1.
Más allá del control: una estrategia de prevención y educación
Fuentes de la Dirección de Sanidad Animal destacaron que este operativo no es una medida aislada, sino la continuación de un trabajo sostenido y multifacético en la zona. "Nuestro objetivo es construir una comunidad más segura para todos. No se trata solo de responder a las denuncias, sino de anticiparnos a los problemas a través de la prevención", señalaron.
En este sentido, el organismo ha desplegado previamente en el Barrio Unión diversas iniciativas gratuitas para los vecinos, incluyendo campañas masivas de vacunación antirrábica y desparasitación, herramientas clave para prevenir la transmisión de enfermedades zoonóticas. Asimismo, se realizaron jornadas de patentamiento gratuito para facilitar a los vecinos el cumplimiento de la normativa.
El pilar educativo ha sido fundamental en esta estrategia. A través del proyecto "Sembrando valores, protegiendo vidas", el equipo de Sanidad Animal visitó la escuela primaria del barrio para trabajar directamente con los alumnos del primer ciclo. En este encuentro, se abordaron conceptos esenciales sobre el cuidado, el respeto y las responsabilidades que implica tener un animal de compañía, buscando forjar desde la infancia una cultura de tenencia responsable.
Esta combinación de fiscalización, prevención sanitaria y educación demuestra el enfoque integral de la Dirección de Sanidad Animal, un área municipal que trabaja activamente no solo para hacer cumplir las ordenanzas vigentes, sino para generar un cambio cultural positivo que beneficie a toda la comunidad y garantice el bienestar animal.