El IPPV lleva seis viviendas recuperadas desde que comenzó la gestión. Esto se traduce en seis familias rionegrinas que hoy tienen una casa digna donde formar su hogar. La última entrega fue la de Juan Maragaño de Cipolletti, quien junto a sus hijos –los tres con discapacidad-, recibieron la noticia el sábado previo al Día del Padre.

El plan de recupero que se empezó a implementar en diciembre de 2023, busca detectar viviendas que se encuentran en situaciones irregulares, ya sea deshabitadas, alquiladas o cedidas. Es decir, aquellas que fueron otorgadas por el IPPV como vivienda única familiar y cuyos beneficiarios no cumplen con los requisitos: habitar la casa y pagar las cuotas.

Luego, el Instituto analiza los casos más urgentes de familias que se encuentran en una posición compleja, para poder otorgárselas.

“Es un problema que se reitera en distintas localidades de la provincia”, sostuvo el interventor del IPPV, Mariano Lavin, en diálogo con LU19. “Si alguien está alquilando una casa del IPPV y no terminó de pagarla, quiere decir que tiene otro lugar para vivir, con lo cual le está quitando la posibilidad a alguna familia”, agregó.
La situación de Juan, el vecino de Cipolletti, requería una solución inmediata, ya que él -con EPOC- y sus dos hijos, vivían en una casa sin gas natural y en condiciones precarias.

“Puntualmente en Cipolletti, la persona que vivía no era beneficiario del IPPV y tras un largo proceso, la pudimos recuperar. Teníamos el caso de Juan y sus dos hijos que era de alta vulnerabilidad y pudimos darles una casa”, explicó Lavin.
Hace unos años, Juan, que es peón rural, había sido despedido de la chacra donde trabajaba y vivía; luego de estar durmiendo en un auto, la Municipalidad le cedió una casa en comodato, aunque las condiciones no eran las mejores.

“Hoy está feliz de tener una casa para él y sus dos hijos, a quienes crió solo desde chiquitos. Les cambió la vida y esto realmente revaloriza lo que hacemos; es complejo recuperar una vivienda, pero tenemos estas familias que están esperando y eso nos motiva”, destacó el interventor.

Actualmente, el Instituto tiene alrededor de 45 casos más, “aunque llevan un tiempo más prolongado porque terminan en la Justicia y ahí todo se hace más largo, pero la decisión es firme”, finalizó.