Cinco personas fueron imputadas por delitos de usurpación por despojo, amenazas y lesiones graves en un hecho que tuvo lugar en una vivienda social ubicada en Barrio 2 de Abril de nuestra ciudad, cometidos en contra de su inquilina y su entorno. Los imputados, actuaron con un claro reparto de roles y acuerdo de voluntades, junto a otras personas no identificadas, sumando un grupo total de aproximadamente diez personas.

El incidente comenzó a las 9:30 horas, cuando los imputados se presentaron en la vivienda con la intención de despojar a la inquilina legítima, quien residía allí desde noviembre de 2022. Al momento del ataque, la inquilina había salido para su trabajo, quedando en la casa su amiga, su hijo de 12 años, y el hijo de tres meses de la víctima, junto a su niñera. Situación que vigiló una de las imputadas.

Según los hechos relatados, dos de las mujeres imputadas intentaron inicialmente forzar el portón de entrada, y al no lograrlo, uno de los hombres utilizó un vehículo Volkswagen Gol Country para arrancarlo. Luego, el grupo ingresó al terreno y forzó las puertas de la vivienda, enfrentándose violentamente con las dos mujeres que se encontraban en la vivienda. En medio del ataque, el único hombre imputado blandió una herramienta contundente, amenazando a las víctimas, mientras el grupo golpeaba a las víctimas, exigiendo que se retiraran.

Es así que las víctimas requerían que dejaran de golpearlas y de invadir la vivienda, dado que había menores de edad allí adentro. En ese momento una mujer del grupo tomó al bebe en brazos, lo zamarreó en forma violenta gritándole a ambas mujeres; quienes logrando las víctimas recuperar el bebé, escaparon. 

Luego que las retiraron a golpes a las dos mujeres, el hombre utilizando la herramienta tipo masa, golpeó en la cabeza a una de las víctimas logrando que se desvanezca momentáneamente, entre otras agresiones. A los pocos minutos pudo volver en sí e intentar recuperar a su hijo de 12 años que había buscado refugio escondiéndose en la casa.

Una vez dentro de la vivienda, los imputados retiraron en forma violenta las pertenencias de la inquilina a la calle, dañando muebles, ropa y artículos de uso personal, manteniéndose en el interior hasta la hora 17:13 del mismo día, donde personal de la Comisaría 42 procedió a realizar un allanamiento en lugar con la detención de los indicados quienes estaban junto a menores de edad.

Este hecho no fue aislado, sino que se enmarca en amenazas previas realizadas por el único hombre imputado, quien ya había advertido que la desalojaría por la fuerza si no abandonaba la vivienda voluntariamente.

Las pruebas contra los imputados incluyen testimonios de las víctimas, certificados médicos, fotografías del lugar, denuncias penales, y el acta de allanamiento y detención, acta de inspección del Instituto de Tierras y Viviendas Municipal, contrato de alquiler entre ambas partes, copia de legajos donde los imputados habrían agredido a la mujer y su grupo familiar al intentar recuperar la vivienda.

Todos ellos fueron asistidos por un abogado defensor particular que se opuso a una porción de la plataforma fáctica relatada por los fiscales. Rechazó la medida cautelar solicitada por la fiscalía.

El Juez de Garantías tuvo por formulados los cargos por los delitos de usurpación por despojo, amenazas, lesiones leves y graves y daños que se encuadran en los artículos 89, 90, 149 bis, 181 inciso 1° y 183 del Código Penal para las cuatro mujeres imputadas. En el caso del imputado se agregan los agravantes por violencia de género, conforme a los artículos 89, 90 en función de la remisión del artículo 92 al 80 inciso 11, y 149 bis 1° y 2° supuesto, además de los ya mencionados.

Otorgó cuatro meses de plazo para llevar adelante la investigación preliminar e impuso una medida cautelar de prohibición de acercamiento y contacto a las víctimas por parte de los cinco imputados.